El Colegio Profesional de Trabajo Social de Málaga manifiesta su apoyo y solidaridad ante la situación sufrida por una compañera de los Servicios Sociales del Ayuntamiento de Málaga, en la cual ha vivido amenazas y agresiones verbales de extrema gravedad por parte de una persona usuaria. Asimismo, expresamos nuestra más enérgica repulsa ante las situaciones de violencia que pueden sufrir las y los profesionales del Trabajo Social, al igual que cualquier otra persona profesional.
Las trabajadoras y los trabajadores sociales actuamos con personas que están sufriendo las consecuencias de la actual pandemia y que padecen situaciones graves de exclusión social, la mayoría de las veces, sin disponer de los recursos necesarios para intervenir. Los sistemas de protección se manifiestan claramente insuficientes para dar respuesta a la realidad en la que nos encontramos, y son las personas profesionales de los equipos de base quienes tienen que abordar esas situaciones. Es necesario, por tanto, fortalecer nuestros sistemas de protección, dotando a los Servicios Sociales de los medios necesarios para poder realizar una intervención de calidad.
Pero a pesar de la complejidad de nuestro trabajo, es inaceptable que se den situaciones como las vividas por nuestra compañera, y nunca pueden ser normalizadas. No es tolerable que las personas profesionales de los Servicios Sociales, del Sistema de Salud, o de cualquier otro espacio en el que se trabaja por el bienestar de las personas, tengan que sufrir ningún tipo de amenazas, coacciones o agresiones.
Desde el Colegio Profesional de Trabajo Social de Málaga seguimos ofreciendo nuestro apoyo a quienes sufran estas situaciones, asimismo ofrecemos nuestra colaboración tanto al Ayuntamiento de Málaga como al resto de administraciones y entidades para apoyar a todas las compañeras y compañeros que se puedan encontrar en situaciones similares, así como para plantear las medidas que sean necesarias.