Entendemos por perfil profesional el conjunto de competencias técnicas (conocimientos), metodológicas (habilidades), de relación (participativas) y personales (cualidades y actitudes) que permiten al profesional del Trabajo Social acceder a una organización concreta.
Por tanto, el/la alumno/a egresado/a en Trabajo Social es un profesional con formación teórica interdisciplinar. De carácter humanista, con un profundo sentido ético y crítico, y con una visión integral de la realidad que lo dota de una conciencia social democrática, igualitaria y justa.
El respeto a la igualdad, el valor y la dignidad de todas las personas son sus principios y debe contribuir al desarrollo integral del individuo, incrementando la calidad de vida de este, estableciendo condiciones sociales de participación y construcción de una sociedad humana más justa y solidaria.